Se caracteriza por la ejecución dinámica de posturas de yoga (asanas), que se realizan sin mediar relajación entre una y otra; sino que las mismas son realizadas una tras otra.
El ejecutante descansa en la postura misma.

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La ejecución puede ser de tres formas:

• dinámica arrítimica,

• dinámica rítmica

• dinámica artística.

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Integra los principios fundamentales de Iyengar (precisión, seguridad y sutileza), Ashtanga Vinyasa (continuidad y calor), Vinyasa (suavidad y sensibilidad) y Yoga Energético (concentración e internalización). 

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A través de 5 técnicas:

• Asana (alineación corporal correcta),

• Vinyasa (sincronización de cuerpo y respiración),

• Bandha (energía),

• Pranayama (respiración)

• Drusti (atención concentrada)

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Se consigue alcanzar un estado de profunda relajación y libertad interior, a la vez que el organismo se renueva y revitaliza armonizando todos los sistemas: respiratorio, digestivo, circulatorio, endocrino, inmunológico y reproductor.

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